La fisioterapia geriátrica trabaja la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las patologías asociadas a las personas de edad avanzada.
Su objetivo es fomentar el movimiento y la autonomía de las personas mayores para que puedan envejecer con una mejor calidad de vida y conservando en la medida de lo posible su independencia en todos los ámbitos de su vida.
El tratamiento debe comenzar siempre con una evaluación en profundidad de las capacidades de la persona mayor: fuerza, equilibrio, coordinación, cognición, agilidad y posible fragilidad, entre otras.
Prevención, tratamiento y rehabilitación
La fisioterapia geriátrica o gerontológica debe basarse siempre en un estudio exhaustivo de la persona que permita realizar un plan personalizado basado en las características y necesidades del paciente. Es imprescindible adaptarse a la situación y los problemas de la persona mayor para garantizarle un envejecimiento lo más saludable posible.
Algunos tratamientos van destinados, por ejemplo, a mejorar la coordinación y el equilibrio, reduciendo el riesgo de lesiones producidas por caídas; a mejorar el control postural; o a mantener la autonomía de los movimientos.
Otras veces trabajamos para disminuir el dolor y retrasar el avance de la patología, recuperar la masa muscular y recuperar la capacidad de movimiento para poder también así combatir la falta de actividad.
Con ello conseguiremos además mejorar el sistema inmunológico y aumentar la autoestima del paciente, la vitalidad y la seguridad en sí mismo disminuyendo su sentimiento de dependencia, lo que conllevará reducir el estrés y la ansiedad y mejorar la calidad de sueño.
Patologías más comunes de la fisioterapia geriátrica
Todo esto nos ayudará a mejorar la autonomía para envejecer con una mejor calidad de vida. Ponte en contacto con nosotros, podemos ayudarte a ti o a tus mayores a disfrutar de un envejecimiento más saludable.